Los sonidos de la felicidad pura y descarada se pueden escuchar en las risas de los niños mientras juegan. Su pura diversión se refleja automáticamente en sus sonrisas brillantes y sus gritos de alegría. Saltar en charcos de barro para darse un chapuzón, jugar a disfrazarse y hacer fantasías, hacer burbujas y hacer monos en los juegos infantiles son parte del ámbito especial de entretenimiento de un niño.
Es un momento de exploración mientras se superan los límites de su mundo. Al jugar en el interior o retozar al aire libre, los niños sólo quieren divertirse. A veces solo, otras con hermanos o amigos. Ver a un niño jugar puede recordarle las alegrías sencillas que la vida tiene para ofrecer.
