Muchos niños quieren ser veterinarios cuando se les pregunta sobre el trabajo de sus sueños en el futuro. Les gustaría cuidar gatos, perros, caballos y todos los demás animales lindos, ya que simplemente adoran a sus propias mascotas. Pero cuando crecen se dan cuenta de que es un trabajo duro y que la muerte también está involucrada. Además, es necesario estudiar durante muchos años para que estos planes muchas veces se abandonen.
Aún así, hay muchos veterinarios que se aseguran de que nuestros queridos animales sean tratados bien y de que tengamos una persona de contacto, si necesitamos algún consejo.